El queso de anacardos y orégano es una deliciosa alternativa vegana, ideal para quienes buscan opciones saludables y sin lácteos. Se prepara remojando anacardos para suavizarlos y luego mezclándolos con agua, jugo de limón, ajo, sal y orégano fresco o seco. El resultado es una crema untuosa, llena de sabor mediterráneo gracias al toque herbal del orégano. Es perfecto para untar en pan, acompañar vegetales o como aderezo para ensaladas. Este queso destaca por su versatilidad y su alto contenido en grasas saludables, convirtiéndose en una opción nutritiva y deliciosa para diversos platillos.